Masías, economista de profesión, se desempeñó por poco más de tres años como titular de la Superintendencia Nacional de Educación Universitaria (Sunedu), hasta febrero del 2018.
(Agraria.pe) El Fondo Nacional de Financiamiento de la Actividad Empresarial del Estado (Fonafe) nombró a Lorena Masías como presidenta del directorio de Agrobanco, en reemplazo de Luis Palomino.
Masías, economista de profesión, se desempeñó por poco más de tres años como titular de la Superintendencia Nacional de Educación Universitaria (Sunedu), hasta febrero de 2018. Anteriormente, presidió la Caja de Pensiones Militar Policial por cuatro años, en donde se encargó de implementar el nuevo régimen de pensiones, además de hacer seguimiento a las inversiones del fondo de pensiones. También ha trabajado en el Fondo Monetario Internacional (FMI), la Superintendencia de Banca, Seguros y AFP (SBS) e Indecopi. Cuenta con una maestría y doctorado por la Universidad de Pittsburgh.
Luis Palomino deja Agrobanco tras un año en el cargo. Fue encargado de aplicar un plan para reestructurar y sanear las finanzas del banco, cuya crisis fue originada por un cambio en el modelo para financiar el agro. En 2018, Agrobanco mantenía una deuda con sus acreedores que llegó a los S/1,000 millones debido a la alta morosidad de su cartera. Hay una investigación fiscal sobre presuntas irregularidades en la aprobación y colocación de créditos a medianos agroexportadores.
Una semana antes de dejar el cargo, Palomino indicó que recibía presión desde el Ministerio de Agricultura (Minagri) para obtener resultados de crecimiento más rápido. También indicó que el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) no daba luz verde a la creación del Fondo para la Inclusión Financiera del Pequeño Producto Agropecuario (FIFPPA), cuya creación se estableció por ley a fines del año pasado.
Pérdida de documentos
En los últimos meses de su gestión, Agrobanco informó sobre pérdida de información relacionada a exfuncionarios del banco, solicitada por una comisión investigadora del Congreso. La entidad denunció el hecho ante la Comisaría de San Isidro. “La documentación requerida por la Comisión Investigadora es inubicable e inexistente en los archivos del banco”, indicaron en un comunicado, en junio.
Palomino precisó que la información perdida estaba relacionada a personal empleado antes de su gestión y que era de difícil acceso por encontrarse en zonas alejadas como Pichanaki, en Junín.
Fuente: Semanaeconómica