Presentarán tecnologías con sistema de labranza cero y con siembra directa, que permitirán ahorrar entre 30% y 40% de los costos actuales de producción.
Por: Redacción
Lima, 20 de mayo 2014 (Agraria.pe) Especialistas del Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA) de Lambayeque investigan nuevas variedades de híbridos de maíz resistentes a sequías para hacer frente a los efectos de la falta de lluvias, informó la Agencia Peruana de Noticias “Andina”.
Al respecto, el investigador de cultivos del INIA de La Libertad, Pedro Injante Silva, señaló que están a punto de presentar esta tecnología con sistema de labranza cero y siembra directa que permitirá ahorrar entre 30% y 40% de los costos actuales de producción de maíz.
Destacó que los costos actuales de producción de una hectárea están en alrededor de S/.7.700. Estos tienden a disminuir aplicando agricultura de precisión hasta S/.4.500 /Ha.
“Actualmente el INIA tiene un híbrido que está dando el boom tecnológico: es el megahíbrido y que está superando rendimientos. Por ejemplo, en Pativilca alcanza las 16 toneladas por hectárea, y en la costa norte produce 14 toneladas. Esto es algo nunca visto en el país, por lo cual el agricultor está apostando muy seriamente por esta variedad”, afirmó.
El investigador refirió que en Lambayeque se siembra maíz en la zona de Batangrande, Motupe y Chongoyape.
“La siembra del cultivo del maíz es muy variable en Lambayeque ya que se pueden sembrar unas 10.000 hectáreas en la campaña agrícola y la próxima unas 17.000”, sostuvo, tras agregar que el problema en esta zona es la escasez de recurso hídrico, lo que limita la expansión de áreas.
Mencionó que actualmente agricultores de Lambayeque obtienen en promedio entre 6 y 7 toneladas por hectárea de maíz y se proyecta llegar a un rendimiento promedio de 10 toneladas en todos los agricultores.
Precisó que el país tiene un déficit del 52 % de la demanda de esta gramínea, en la que en unos tres o cuatro años podrían dejar de comprar maíz al mundo, con el impulso a la siembra de mayores hectáreas destinadas a este cultivo, cuya producción es comercializado en el mercado nacional.
Recordó que los maíces del INIA son resistentes a muchas plagas. “Tratar de encontrar buenos resultados (como caso de resistencia a plagas) nos trae problemas porque baja el rendimiento. Entonces queremos sacar altos rendimientos y control al cogollero (plaga que ataca al cultivo del maíz) que es un problema serio”, anotó.
Perspectivas del cultivo de maíz
Pedro Injante advirtió que se prevé que el maíz en el año 2020 se convierta en el primer cereal en el mundo en importancia, porque es un producto que tiene más de 4.000 usos y cada vez se siembra más.
Sostuvo que el INIA realiza un trabajo de campo para comenzar a enseñar al agricultor una agricultura de precisión.
La agricultura de precisión se enfoca a aplicar fertilizantes y productos en tiempo real y en momento justo, es decir, no en utilizar más componentes químicos o semilla que lo que requiere el campo.
Advirtió que con la puesta en funcionamiento del proyecto de irrigación Olmos se verá mucho avance en innovación y tecnología en el agro. "Hay estudiantes de universidades que están utilizando la mecatrónica para crear sistema de sensores para determinar cuánto requiere de humedad el campo", concluyó.