Aproximadamente, el 30% de los alimentos que se consumen en los países en desarrollo son productos perecederos, sin embargo solo el 26% de éstos tienen acceso a la refrigeración
Por Raúl Yaipén Carranza
Lima, 6 Junio (Agraria.pe) Según indicó el Departamento de Agricultura y Protección del Consumidor de la FAO, un almacenamiento adecuado es indispensable tanto para la comercialización eficiente por parte del sector privado, como para el mantenimiento de las reservas públicas que pueden ser necesarias a fin de garantizar la seguridad alimentaria.
El mayor acceso al almacenamiento refrigerado en los países en desarrollo podría ser importante para reducir las pérdidas después de la cosecha, mejorar la inocuidad de los alimentos y añadir valor a los productos alimenticios agrícolas. Para lograrlo la FAO considera importante abordar aspectos relacionados con la gestión de las instalaciones como:
Logística
De acuerdo con las estadísticas de la FAO más del 70% de los alimentos dirigidos a los países en desarrollo provienen de pequeños y medianos productores o bien de la importación, siendo que estos alimentos tienen la necesidad de transportarse de zonas rurales alejadas de la capital hacia los centros de acopio y/o abastecimiento.
“Se sabe que un porcentaje cada vez mayor de estos productos tendrá que almacenarse por motivos de logística, distribución o por el simple hecho de que la producción es estacional, mientras que la demanda -en especial de alimentos básicos- existe durante todo el año”, indicó la FAO.
Comercialización
Actualmente, el 30% de los alimentos que se consumen en los países en desarrollo son productos perecederos, sin embargo, solo el 26% de éstos tiene acceso a la refrigeración.
Para lograr un suministro continuo de alimentos inocuos y nutritivos a precios razonables, será necesario incrementar -en los próximos 10 años- la producción de alimentos, disponer de vinculaciones de mercado efectivas entre las zonas rurales y urbanas; contar además con servicios de apoyo eficiente, indicó la FAO
La FAO sostuvo también que el cumplimiento de estas condiciones dependerá de que se efectúen inversiones significativas en la infraestructura rural y los servicios de apoyo.
Esto integrará el funcionamiento y la gestión de las instalaciones de almacenamiento en seco, principalmente para los cereales, frijoles, las legumbres y las leguminosas, así como también el almacenamiento en frío, sobre todo para las frutas y hortalizas, los productos ganaderos y el pescado, precisó la FAO.
“Una buena gestión racional del almacenamiento y de los propósitos, será la que permita a los productores y comercializadores obtener crédito mediante el sistema de certificados de almacenamiento, el cual es un instrumento de comercialización muy eficaz”.
Consideraciones para la inversión en el sector alimentario y almacenamiento
El Departamento de Agricultura y Protección del Consumidor de la FAO, considera que incrementar la producción de alimentos en los países de desarrollo, requiere que se potencien las inversiones en: Instalaciones de almacenamiento y elaboración, mejorar los almacenes comunitarios tradicionales, instalaciones de maquinaria de manipulación, acondicionamiento y envasado, mejorar –considerablemente– las redes viales, el transporte, el suministro eléctrico y los sistemas de comunicaciones.
“Las necesidades de almacenamiento no son estáticas, es necesario tener en cuenta factores que influyen en la inversión como: el crecimiento demográfico, evolución de las preferencias de los consumidores, el cambio climático, migraciones humanas; entre otras, siendo estos puntos determinantes para la localización de la inversión y los plazos”, señaló la FAO.
Formación y aumento de las capacidades
La organización internacional de las Naciones Unidas es enfática al señalar que para lograr que la inversión en la generación de nueva infraestructura y modelos de almacenamiento sean efectivas, éstas deberán ir acompañadas por la capacitación en el diseño y la gestión apropiada de las instalaciones.
De esta manera, se podrá aumentar las capacidades de los agricultores, los comerciantes y otros agentes de las distintas cadenas, así como la comprensión de los factores técnicos y económicos que influyen en la inocuidad, la calidad y el valor de los productos almacenados en las zonas rurales y urbanas, concluyó la FAO.
Datos
• Según proyecciones de la FAO, las inversiones necesarias en almacenamiento frío y seco para el año 2050 serían de US$ 797 mil millones, siendo Asia oriental con US$ 305 mil millones, los que más inversión necesitarían y en un preocupante segundo lugar aparece América Latina y el Caribe con US$ 184 mil millones.