14 febrero 2024 | 10:01 am Por: Redacción

IPE: La agricultura cayó 4.1% en el 2023, el peor resultado desde 1992

IPE: La agricultura cayó 4.1% en el 2023, el peor resultado desde 1992
Arándano explicó más de la mitad de esta caída. Retroceso de agroexportación significó la pérdida de 34 mil empleos formales.

Por: Instituto Peruano de Economía (IPE)

(Agraria.pe) En el 2023, la agricultura peruana anotó el peor resultado en más de tres décadas debido a la escasez de fertilizantes en el ámbito mundial, la alta inflación, las fuertes lluvias en el norte y el estrés hídrico en el sur. Al margen del impacto potencial del fenómeno de El Niño (FEN) en el 2024, concluir los grandes proyectos de infraestructura productiva serán clave para la recuperación del sector que emplea a más de un quinto de los trabajadores en el país.

Crisis del agro
La producción agrícola se contrajo 4,1% en el 2023, al registrar su primer resultado negativo en 14 años y la peor caída desde 1992. Este retroceso se concentró en cultivos de agroexportación (-5,2%) y aquellos destinados al mercado interno (-4,8%), mientras que el desempeño positivo (7,2%) de la agroindustria (como la palma aceitera y el maíz amarillo) atenuó estas caídas.

Entre los productos de agroexportación, los menores cultivos de arándano explicaron más de la mitad de la caída del sector agrícola en el 2023. Afectada por las intensas lluvias y altas temperaturas en el norte del país, la producción de arándano se contrajo cerca de 30% en La Libertad y Lambayeque, lo que resultó en una caída de 12% en el PBI agrícola de ambas regiones. Ello, sumado a la menor producción de aceituna (-14%), espárrago (-6%) y mango (-23%), contrarrestó el mejor desempeño de la uva (+10%), palta (+6%) y café (+3%). Como resultado, los volúmenes de la exportación agrícola cayeron 5% durante el año pasado, lo que contribuyó a la pérdida de 34 mil empleos formales en este sector entre enero y noviembre del 2023.

En tanto, el retroceso de los cultivos destinados al mercado interno responde principalmente a la menor cosecha de papa (-10%), producto de las sequías en las zonas altoandinas y de las menores siembras durante la campaña 2022-2023 (-7%). Más de la mitad de este retroceso se concentró en Puno, con lo que esta región tuvo la mayor caída del PBI agrícola (-39%) del país en el 2023. Esto agravará los niveles de pobreza de la región (41% en el 2022) si se considera que el 40% de puneños se dedica a esta actividad.

Panorama 2024
Si bien los riesgos climáticos han venido moderándose en las últimas semanas, el FEN se mantiene como el principal riesgo para la agricultura en el 2024. Utilizando data de los últimos 30 años, un reciente estudio del BCR estima que la producción agrícola se reduciría hasta en 0,25% a los seis meses de iniciado el evento, producto de los cambios de temperatura y la alteración de los ciclos de lluvia. Este efecto persistiría casi un año.

El norte del Perú sería el más afectado por el FEN en el 2024. Entre agosto y noviembre del 2023, la superficie sembrada de cultivos transitorios (como papa, maíz y arroz) se redujo 17% en promedio. En Lambayeque, esa caída fue de 63%. En la costa sur (Ica, Arequipa y Moquegua) también se observa una caída importante en la siembra para la campaña 2023-2024 (-10%). En contraste, si bien en Huancavelica, Ayacucho, Apurímac y Puno se observan resultados positivos, ello responde principalmente a un efecto base: la agricultura en el sur tuvo un bajo desempeño en la campaña anterior (2022-2023) producto del fuerte aumento en el precio de los fertilizantes.

Infraestructura clave
El crecimiento sostenible del sector depende de políticas para mejorar su competitividad. En esa línea, es necesario una infraestructura productiva adecuada e impulsar otras iniciativas claves como la reconversión hacia cultivos de mayor valor agregado. Al respecto, se espera que Chavimochic III, recientemente adjudicado, duplique la frontera agroexportadora del país (63 mil hectáreas adicionales). Sin embargo, según datos de la contraloría, al cierre del 2023 existen 281 proyectos de inversión en agricultura paralizados, con un costo de S/4 mil millones (15% del total). Además, el proyecto Majes Siguas II en Arequipa se encuentra trabado. Así, superar la crisis del agro en el corto plazo y potenciar su desarrollo en el mediano plazo será difícil sin un esfuerzo conjunto entre los distintos niveles de gobierno.

Fuente: El Comercio

 

Etiquetas: IPE , agricultura
Más de: Negocios