Exportaciones del grano andino en el país altiplánico cayeron durante el primer semestre del 2017. Productores culpan a los precios internacionales y la poca cantidad de mercados. Además, el mercado chino les ha cerrado las puertas a falta de una certificación de inocuidad.
(Agraria.pe) Entre enero y junio del 2017, Bolivia exportó quinua por un valor de 36,2 millones de dólares frente a los 38,2 millones de dólares obtenidos en el mismo periodo del 2016, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE).
Los productores señalan que la caída se debe a los precios internacionales y a la poca cantidad de mercados.
El vicepresidente de la Cámara Boliviana de Exportadores de Quinua y Productos Orgánicos (Cabolqui), Juan Pablo Seleme, explicó que Estados Unidos concentra hasta el 36 por ciento de las exportaciones del cereal. Por esa razón, la variación en el volumen que demanda este mercado afecta directamente en las ganancias de los productores nacionales.
Asimismo, afirmó que Estados Unidos demandó menor cantidad de quinua durante el primer semestre de este año porque acumuló un stock considerable en el intercambio comercial que realizó en los últimos meses del 2016.
“Es probable que en el segundo semestre se note un incremento de exportaciones comparando al primer semestre, demostrando que solo se deba a un problema de stock en Estados unidos. Por otra parte, en el valor seguimos con una tendencia a la baja del precio”, dijo Seleme.
Por su parte, el presidente de la Asociación Nacional de Productores de Quinua (Anapqui), Benjamín Martínez, afirmó que la producción de quinua en Bolivia no es competitiva frente a la producción de países como Perú que implementaron innovaciones tecnológicas en la cadena productiva.
Al mismo tiempo, advirtió que los pequeños productores son los más afectados por la caída de las exportaciones debido a que perciben menos ingresos. Esto provocó que las familias agricultoras no lleguen a cubrir los costos de producción que ascienden a 7 mil bolivianos promedio por cada cinco hectáreas cultivadas.
“Queremos que nos ayuden en abono, hay lugares donde ya no existen animales y no hay abono natural. Se requiere una inversión, queremos que nos ayuden en microriegos, porque hay veces que no llueve en el altiplano”, demandó Martínez.
La situación de los productores se agrava, ya que Bolivia no cuenta con tratados bilaterales de libre comercio, afectando el posicionamiento de la quinua a nuevos mercados.
Al respecto, Seleme estimó que se deben enviar 10 muestras de quinua boliviana a los potenciales clientes para ganar un nuevo mercado en un lapso mayor a seis meses. Indicó que las únicas oportunidades para promocionar la quinua a nivel internacional se reducen a dos ferias productivas que se llevan a cabo en Estados Unidos y Alemania.
En la última década, Bolivia perdió 23 mercados de la quinua, ganó 11 y mantuvo su presencia en 21.
China observa la inocuidad de cereales bolivianos
Juan Pablo Seleme, informó además que la autoridad sanitaria de China prohibió el ingreso del cereal boliviano a su territorio, debido a observaciones en inocuidad. Advirtió que el Gobierno boliviano no tiene como prioridad resolver el conflicto, ya que se antepone la producción de soya como política de exportación nacional.
“La organización equivalente a Senasag (sanidad) en China no ha validado nuestro certificado, esto es un trámite gubernamental responsabilidad del Gobierno y no de los exportadores”, indicó.
Seleme explicó que las autoridades chinas deben inspeccionar las condiciones de producción y las plagas que potencialmente podrían afectar a la quinua boliviana para finalmente emitir el certificado de aptitud para importar el cereal.
“Como el Gobierno no está haciendo ninguna gestión, estamos atrapados, China tiene una demanda importante”, dijo. Solicitó que la Cancillería y el Senasag asuman acciones.
Fuente: Los Tiempos