Sobre los efectos en los cultivos en la costa norte indicó que dependerán de la zona de producción, la variedad del producto y su etapa fenológica. La presencia de lluvias de moderada intensidad beneficiaría al agro tras meses de sequía.
Por: José Carlos León Carrasco
Lima, 20 de marzo 2014 (Agraria.pe) El Comité Nacional Multisectorial encargado del Estudio Nacional del Fenómeno El Niño (ENFEN), que pertenece al Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi), confirmó la presencia del fenómeno “El Niño” en la costa peruana para este año. La magnitud proyectada de dicho evento será leve o moderada.
Al respecto, la presidenta ejecutiva del Senamhi, Amelia Díaz Pablo, señaló que a fines de marzo e inicios de abril ingresará a nuestra costa norte agua cálida (onda Kelvin), que calentará el agua del mar por un periodo de 3 semanas a 1 mes.
Asimismo, indicó que también se ha observado la formación de otra onda que llegará al Perú a fines de abril o inicios de mayo que mantendría 2 meses o más el calentamiento de agua frente a la zona costera.
En ese sentido, la representante del Senamhi destacó que el fenómeno no tendría ningún efecto en la producción agropecuaria de la sierra y la selva, ya que cuando llegue la onda, la época de lluvias habrá concluido en ambas zonas geográficas.
Sobre los cultivos en la costa indicó que los impactos dependerán de la zona de producción, el producto, la variedad y la etapa fenológica. Dijo que incluso el fenómeno puede favorecerlos, sobre todo en la costa norte del país, donde se espera que se presenten lluvias de moderada intensidad tras meses de sequía.
Por su parte, el gerente general de la Asociación Peruana de Exportadores de Mango (APEM), Juan Carlos Rivera, indicó que la presencia de este fenómeno dependerá de cuál sea su intensidad. “En el peor de los escenarios, si las aguas del Pacífico se siguen calentando y se produce un fenómeno similar al registrado en 1997/1998, la producción se afectaría tanto que no habría exportaciones de mango y banano¨, advirtió.
“En primer lugar, no habría floración de los cultivos. En segundo lugar, las lluvias generarían el colapso de las vías de ingreso a las parcelas, ya que el mango y el banano se basan en el minifundio. Hay miles de pequeñas parcelas distribuidas en una gran área donde no hay carreteras sino trochas que ante cualquier lluvia pueden colapsar. En cambio, la uva y los espárragos tienen áreas muy grandes y sus vías de ingreso son asfaltadas y están en buen estado”, resaltó.
Asimismo, dijo que en el mejor escenario -y si sólo hay un ligero calentamiento inicial-, esta campaña podría ser similar a la de 2009/2010, cuando se exportaron 70 mil toneladas de mango. En ese contexto, las exportaciones llegarían ¨con mucho esfuerzo¨ a 100 mil toneladas.
“Los árboles de mango para tener una buena floración deben tener un mínimo de temperatura de entre 15°C y 16°C y un máximo de 27 °C¨, dijo y sostuvo que si la temperatura no se mantiene en ese rango, habría una fuerte caída en la producción.
Por último, recordó que también es importante que no llueva en plena floración (en junio y julio) ni al momento de la cosecha (a fines e inicio de año).