Por: Francisco Seva Rivadulla, periodista agroalimentario internacional
(Agraria.pe) La labor que desempeña la National Mango Board (NMB) como ente es fundamental para impulsar el consumo de mangos en Estados Unidos, señaló César Morocho Marchán, miembro del Consejo de la NMB y actual presidente de la Asociación Peruana de Productores y Exportadores de Mango (Apem).
Morocho Marchan es un especialista en la producción y comercialización de mangos, con un amplio currículo profesional, ya que en el 2005 fue gerente durante 3 años de la Asociación de Pequeños Productores de Mango del Alto Piura (APROMALPI), y después en el 2008 con la Central Piurana de Bananeros Orgánicos (CEPIBO), ambos bajo el sello de Comercio Justo; una experiencia social extraordinaria para su persona. Actualmente es Director Gerente de Frutas de Piura SAC, empresa que exporta mango, uva y banano.
En esta entrevista, repasa las fortalezas, debilidades, así como los retos y desafíos que tiene actualmente el mango peruano tanto en el ámbito de la producción como en el de la comercialización.
¿Cuál es su valoración sobre la labor que desarrolla en la industria la National Mango Board?
Para mí la National Mango Board es un enorme referente que puede ser imitado por otros países y por otros continentes. El valor que le dan ellos a la industria es fenomenal porque ellos trabajan en todos los eslabones de la cadena, con el que produce, con el que empaca, con el que exporta, con quien importa y con los consumidores. Es decir, están en cada eslabón, por lo que el trabajo profesional y el nivel de organización que tienen en Estados Unidos es espectacular. A mí me ha tocado ser miembro allí durante tres años y creo que voy a hacer tres años más, y además de ser una extraordinaria plataforma de aprendizaje, es también una plataforma para ser imitada.
¿Cuál es la superficie y producción de mangos en Perú?
Atendiendo a los últimos censos, en Perú tenemos alrededor de 34.000 hectáreas. En el norte del país hay una ciudad que se llama Piura, allí está el valle San Lorenzo, que concentra el 70% de la producción de Perú. A 180 kilómetros hacia el sur está el Valle de Lambayeque que concentra el 12%, y el ultimo Valle se llama Casma, y está a setecientos kilómetros de Piura, hay un 18% de producción. La mayoría de nuestros mangos son de la variedad Kent.
Tenemos un crecimiento sostenido a nivel de la producción, y por hacer referencia al año pasado, en el que se comercializaron 235.000 toneladas, un volumen importante, fueron algo más de 10.000 contenedores. A nivel de Perú este año, hemos tenido algunos problemas con la climatología y agua, pero creo que estaremos bordeando entre las 200.000 y 207.000 toneladas más o menos.
La propiedad de la tierra más o menos son 5 hectáreas, si tenemos 34.000 hectáreas, podemos hablar de un promedio de unos 6.800 productores
¿Qué opinión le merece la labor de la National Mango Board en cuanto a promover el consumo de mango? ¿Considera que va a seguir creciendo el consumo de mangos en EE.UU.?
Creo que sí definitivamente. El sistema organizativo de la National Mango Board, además de ser muy profesional, tiene siempre una visión a medio y largo plazo, sin dejar lo urgente, y están siempre pendientes de todo lo que pasa en la industria, y tienen una adaptabilidad muy importante. Considero que la labor que realiza la National Mango Board en su rol de ente promotor del consumo tiene éxito e incrementa el consumo del mango por tres razones, en primer lugar, ellos se preocupan de que en los anaqueles de los supermercados tengan fruta todo el año, y a Dios gracias, en el mundo hay oferta todo el año, y en Estados Unidos, hay mangos de Brasil, Ecuador, Perú, México, de Centroamérica, Haití, Hawái, y constantemente hay fruta allí. Con su estrategia, recuerdan a los consumidores que van a tener siempre mangos en los anaqueles mencionados anteriormente.
En segundo lugar, creo que el nivel de versatilidad que le dan al mango es buenísimo ya que las redes sociales, impresiones, con influencers a nivel de programas de televisión, demuestran la versatilidad de la fruta, no solamente como fruta fresca sino como un insumo que puede ser aprovechado por el arte culinario allí y también por los postres, por lo que la versatilidad comercial o publicitaria que ellos le dan, hace que el mango siempre esté en la mente del consumidor.
Y por último la información que tienen de todos los países que exportan mangos a Estados Unidos les permite saber cuándo tenemos los picos, y en los mismos, ellos tienen un fondo reservado para hacer promociones, entonces juntando esos tres pilares, logran que cada consumidor tenga una buena experiencia con el mango y repiten su consumo, y eso ha llevado a incrementar considerablemente los niveles de consumo. Por ejemplo, aquí en Perú si tomamos cifras anteriores, el año pasado hemos superado los 16 millones de cajas que se exportan a Estados Unidos, y hace nueve años enviábamos nueve millones de cajas, por lo que ha habido un crecimiento sostenible. La dinámica de crecimiento ha sido en todos los países que exportan mangos a EE.UU.
Nosotros allí comenzamos en la semana 46 aproximadamente y terminamos en la semana 13 o 14, pero a Estados Unidos enviamos fruta en la semana 8 y en esos tiempos hay demostraciones claras de incrementos en consumo.
¿Cómo ha afectado la crisis del Covid 19 al sector del mango peruano?
Muchos pensaban que la pandemia iba a ser coyuntural, pero con los niveles de continuidad es algo estructural que ha golpeado la economía a nivel mundial, y a nivel de Perú, se debe tener, como en todos lados, una adaptabilidad a ello pues esta “nueva normalidad” se va a quedar con nosotros y lo que nos queda a los productores de mangos de Perú es en primer lugar, adaptarse para que los trabajadores sigan laborando en mango.
Las labores de producción son esenciales para la producción de mangos de calidad, y comento esto porque las costumbres en el consumo de fruta también han cambiado, ahora vemos cómo el consumo de fruta fresca es on line, y anteriormente tocaba la fruta, la olía, ahora tienes que tener la confianza de que esa fruta es la mejor para evitar cualquier tipo de decepción por parte del consumidor final. Por tanto, aquí a nivel de producción, en empaque y en exportación, hay que cuidar muchísimo ese gran nivel de calidad que nos va a permitir seguir presentes en los mercados internacionales en los que estamos actualmente.
¿A qué retos y desafíos se enfrenta el sector del mango peruano?
En Perú tenemos una gran mayoría de pequeños productores, por lo que es muy importante que a nivel de Estado e incluso de los distintos eslabones de la cadena del mango ayuden a la formalización de estas pequeñas empresas agrícolas porque Perú está creciendo constantemente en el nivel de productividad y mayor área cultivada, pero si no se desarrolla, es decir si estos pequeños productores no asumen que hay que tener certificaciones, estándares de calidad y adaptarnos a lo que el mercado pide, perderemos competitividad y podríamos salir del mercado.
Siempre se cree que el productor está es una especie de desventaja frente a los exportadores e importadores. Por ello, un gran desafío muy importante es ayudar al desarrollo de los pequeños productores.
Asimismo, los niveles de producción son muy altos. Este año la infraestructura de nuestro Perú no soporta más de 850 contenedores por semana, si en una semana hay 1.000 contenedores para exportación no va a poder realizarse pues tenemos carencia de plantas de procesamiento, vamos a tener también carencia de contenedores, tenemos un puerto que está muy cerca pero que puede colapsar. La infraestructura hay que repotenciarla para el nivel de crecimiento que vamos teniendo.
Y, por otro lado, el nivel de crecimiento en volúmenes que estamos teniendo exige que busquemos nuevos mercados para que se incremente el consumo. El mercado del mango peruano es 60 por ciento Europa – que incluye a Inglaterra -, de 30 a 35 por ciento que corresponde a Estados Unidos y Canadá, y 5 a 10 por ciento al resto del mundo. Muy poco a Asia y Oceanía y muy poco a Latinoamérica. Por lo tanto, es necesario abrir más mercados.
Otro importante reto es que nosotros deberíamos asegurar el Shelf life de la fruta, pensando en Asia tenemos líneas navieras que llevan nuestra fruta en 30 y 35 días, por lo que debemos pensar para estos viajes en atmósfera controlada o algún tipo de cera, que minimice la emisión de etileno y, por ello, la maduración de la fruta. Y de forma transversal, no perder la calidad.
¿Rusia y Medio Oriente pueden ser mercados interesantes para el mango peruano?
El mercado de Medio Oriente en la medida que podamos llegar con fruta de calidad es muy bueno e interesante. Creo que es un reto para nosotros desarrollar este mercado. Con el mercado de Rusia ya venimos trabajando, de hecho a San Petersburgo desde el puerto de Paita son más o menos 26 días, pero ya hay exportaciones directas a este país; pero también consideramos a Rotterdam (Países Bajos) como principal puerto de entrada. Hay muchos importadores holandeses que recogen fruta de Perú y también es un gran comprador. En el caso de Rusia, hay que afianzar mucho más las relaciones comerciales, pero son mercados potenciales para nuestro país.
El nivel de conocimiento del consumo respecto al mango peruano que es el Kent, que es un mango duro, en comparación al Ataulfo o Edward, que son más sin fibra, conforme vayamos garantizando una experiencia única al consumidor, estos mercados mencionados anteriormente irán creciendo.
¿Qué posibilidades comerciales ve en Japón y en China?
Los mercados de Japón y Corea son enormemente exigentes en cuanto a la calidad de fruta, pero no es imposible trabajar con ellos, yo personalmente en mi empresa hemos hecho operaciones con ambos países por vía marítima y aérea, y si bien es cierto no hemos tenido los resultados esperados, porque el transito es demasiado largo, pero sí sabemos que es posible. En el futuro, deberíamos tener alguna estrategia en conjunto por vía aérea, y podría ser una experiencia interesante.
El mercado de China siempre está esperando la fruta en el Año Nuevo Chino, y eso es más o menos la última semana de enero y primera de febrero, que es cuando la producción de Piura está terminando y con unos grados de maduración bastante avanzados, y con viajes de más de 35 días, es demasiado peligroso. Pero tenemos que trabajar en los mercados chinos para que sepan que se puede comer esta fruta antes del Año Nuevo, y podemos enviarles fruta desde el mes de diciembre y llegar antes a este mercado.
¿Está a favor de un sello de calidad para los mangos de Perú?
Por supuesto que sí. Cualquier sello de calidad empodera al país que lo tiene en exigir a quienes van a acceder al mismo con unos protocolos, unos estándares de calidad y, por lo tanto, ese sello de calidad bien trabajado, va a ser una garantía para entrar a nuevos mercados exteriores, así como darle confianza al consumidor y al cliente final. Es importante trabajar esto no solamente con el mango sino con todos los productos. Un sello trabajado con las autoridades gubernamentales aquí en Perú sería un enorme beneficio para cualquier fruta que tenga ese sello. Ha habido intentos y esfuerzos, con la marca Perú, pero es demasiado genérica, sin embargo, hay que llegar a las especificidades de frutas como el mango. Estoy totalmente a favor y hay que impulsar una marca Perú.
¿Va a seguir creciendo el consumo de mangos peruanos en los próximos años?
Estoy seguro de que sí. Nosotros tenemos un año bueno y después otro con menos producción. Tenemos un crecimiento constante de mango, por lo que los niveles de producción se incrementan cada año, es difícil que bajemos de las 200.000 toneladas, y vamos a tener incremento por productividad o incremento de hectárea. Pero la productividad no nos hace necesariamente competitivos, son cosas distintas.
Para ser competitivos en el mercado, tenemos que crecer atendiendo a las exigencias del mercado. No podemos ser productivos con un mango pequeño de calibre 14, el mercado no lo quiere, Perú tiene que ser productivo con calibres 7, 8, 9 y 10.
Creemos en el crecimiento de las exportaciones de mango por parte de Perú. El año pasado despachamos 235.000 toneladas, el 2018 se envió 168.000, y este año estamos un 15 por ciento menos (respecto al 2019), y podemos crecer tranquilamente entre un 5 y 10 por ciento anualmente.
¿Qué posibilidades tiene el mango orgánico en Perú?
Eso va a depender mucho de lo que quiera y demande el mercado. Aquí en Perú ha habido muchos ejemplos de producción orgánica y sigue habiéndola. De hecho en 2005, cuando comencé a trabajar con pequeños productores que tenían producción de mangos orgánicos en el sistema Fair Trade, de hecho, producían mango orgánico “Fair Trade”, y teníamos demanda y muy buena acogida en Europa.
Creo que Perú está preparado y puede satisfacer y atender la demanda de mango orgánico. De hecho, en mi empresa trabajamos con pequeños productores de mangos orgánicos y tenemos clientes europeos de mangos orgánicos. Actualmente, no hay mucho mango orgánico peruano, puede ser entre el 5 y 10 por ciento del mercado.
¿Puedes hacer una radiografía del sector del mango congelado en el Perú?
Por la alta cantidad de oferta en el Perú, no puede consumirse toda como mango fresco, por lo tanto, un 30 y 35 por ciento de la producción se va a mango procesado. No contamos con muchas plantas de procesamiento, pero para a este mercado hay que tener infraestructura adecuada, ya que sí existe una gran demanda a nivel internacional para el mango congelado y a nosotros nos falta mucha infraestructura de frío.
¿Hace falta ordenar más la oferta en el mango peruano?
Yo creo que sí, APEM saca en temporada una estadística, y toma decisiones para no inundar un mercado y observamos con la información estadísticas, y los exportadores no bajan de 150. Y en los últimos diez años, los veinte primeros concentran el sesenta por ciento de la producción, y hay muchos con exportaciones de pocos contenedores para exportar. Y por eso hay que concentrar más nuestro sector y ordenar la oferta.