04 julio 2018 | 09:24 am Por: Edwin Ramos | prensa@agraria.pe

Observó Clímaco Cárdenas, presidente de Conveagro.

El dinero gastado por el Gobierno en comprar los excedentes de papa podría haberse invertido mejor en desarrollar plantas de procesamiento

El dinero gastado por el Gobierno en comprar los excedentes de papa podría haberse invertido mejor en desarrollar plantas de procesamiento

Vocero de gremios productores dijo que esa sería una solución de mediano y largo plazo para el problema de desplome de precios. En tanto, representante del Centro Internacional de la Papa incide en necesidad del desarrollo de cadenas productivas que aprovechen nuevos nichos de mercado. 

(Agraria.pe) Tal como sucede con las heladas, que cada año provocan estragos a pesar de que está bastante claro en qué fechas suceden y los lugares que más afectan, la sobreproducción de papa es otro evento que parece camino a repetirse.

La voz de alerta la dio Victoriano Fernández, presidente de la Asociación de Productores de Papa del Perú (APPAPA Perú), quien incluso refirió que muchos agricultores, tras el salvataje de S/ 50 millones dispuesto por el Estado para la compra de los excedentes del tubérculo, consideran que ya tienen en éste a un comprador seguro.

Este incentivo perverso podría haberse evitado. Así lo entiende Clímaco Cárdenas, presidente de Conveagro, para quien el dinero utilizado por el Gobierno para la compra de dichos excedentes pudo tener otro destino que permitiera desarrollar una solución permanente al problema.

“Con los millones de soles de subvención en la sierra peruana para comprar el excedente de papa, ¿no habría sido conveniente poder hacer cuatro platas regionales para producción de papa, maquila y sacar papa precocida? Era una solución no para el momento sino para el mediano y largo plazo, era enseñar a pescar al productor”, declaró. 

En esa línea, agregó que la importación de papa precocida afecta a los pequeños productores nacionales y que, en la variedad blanca –que es la que se usa para ese fin- alcanza el 14% del total del mercado, compitiendo de modo desleal con los locales que no tienen acceso a tecnología ni métodos para incrementar su productividad. 

“Los agricultores de la sierra peruana no cuentan con un estado promotor como tiene Holanda; ahora nadie va a dejar de reconocer que con un precio de papa precocida a S/ 2.30 en puerto no podemos mejorar esa propuesta competitiva… Ahí tenemos que hacer un llamado a los industriales a ser socialmente responsables con los trabajadores del agro en el Perú, generando sinergias para encontrar nichos especiales para esta papa blanca precocida”, sostuvo.

Nichos de alto valor
De similar opinión, aunque con otros matices, fue André Devaux, director regional del Centro Internacional de la Papa (CIP) para América Latina y el Caribe. Desde su perspectiva, hay que desarrollar nuevas cadenas productivas que permitan responder a demandas definidas en el mercado, especialmente en nichos de alto valor como el de los chips de papa nativa.

“Es un producto (la papa nativa) que no existe en ningún otro lado. Los pequeños productores tienen una ventaja comparativa porque esas papas crecen en zonas de altura. Hay que desarrollar oportunidades de mercado que les den una ventaja comparativa… hemos analizado los datos y la demanda sigue incrementándose, hay que buscar diferenciarse en el mercado, que el agricultor no debe producir lo mismo que todo el mundo”, estimó. 

Consideró asimismo que el mercado interno no es el problema en cuanto al consumo de papa, pues actualmente el Perú alcanza un considerable índice per cápita es de 80 kilos, lo que supera largamente a otros países de la región como Bolivia, donde se llega a los 50 kilos.

Reiteró por ello que el problema de la mayoría de agricultores en relación al precio es que se están articulando al mercado de consumo tradicional, por lo que alternativas innovadoras como la industrialización pueden resultar altamente beneficiosas para encontrar un camino permanente de solución. 

Etiquetas: papa
Más de: Negocios