(Agraria.pe) Samir Giha es CEO de Cacaosuyo, empresa recientemente galardonada con premios de distinción internacional en el sector de cacao y chocolate. Señala que el cacao peruano es un producto muy diferenciado; el Perú es el centro genético mundial del cacao. “En las pruebas de catas que se dan en diferentes partes del mundo, el Perú sigue siendo siempre el ganador”. En ese sentido indica que la competencia frente a otros países nunca fue difícil para la agrodiversidad del Perú.
¿Cuál es la situación del cacao y chocolate en el Perú?
Cuando hablamos de chocolate, siempre se habla del cacao; uno es parte del otro, sin el cacao no hacemos chocolate, es como la uva para el vino. Nuestra industria en el Perú tiene también dos partes: una parte son los productos que usan algo de cacao, pero no son necesariamente chocolates finos. Por otro lado, nosotros nos encargamos de hacer chocolate superior, lo que compite a nivel mundial.
De hecho, son los más costosos y ante la pandemia ha habido una caída debido a los centros comerciales cerrados. Si bien ya se están reabriendo, no todos consumen chocolates que pueden costar S/ 20 la barra.
Eso hace para nosotros un poco difícil la venta en el Perú y por eso sufrimos todos los que estamos en el mundo del chocolate fino. Hay otras salidas en donde por supuesto la calidad del chocolate peruano se está conociendo a nivel mundial y eso nos abre puertas al exterior y quizá para el caso de Cacaosuyo, ha sido lo que nos ha salvado.
¿Qué tanto ha mejorado la calidad del cacao peruano ante el mercado internacional?
El cacao peruano siempre ha sido bueno ante los ojos del mundo. El Perú, en los últimos diez años, empezó a ser un país que aparece en el mapa de productores y ha estado creciendo meteóricamente en su volumen. Precisamente en eventos de mayor prestigio como el International Chocolate Awards, que es como El Oscar del chocolate, hacen que los productores de chocolate en el Perú busquemos el mejor cacao para poder competir a nivel internacional.
Y así venimos ganando en los últimos siete años en este concurso, demostrando que el cacao peruano está cada vez más valorado. Esperamos que esto se traduzca y el chocolate peruano sea visto como la cocina peruana.
Siempre hay algo por mejorar, ¿qué nos faltaría en todo caso?
Estábamos a punto, si no hubiera sido por este evento [coronavirus] que ha sido terrible. En realidad, siempre falta algo por mejorar. Me da la impresión que el Estado está empezando a darse cuenta que promover nuestro cacao, o por lo menos el chocolate, es algo importante. Así como hemos promovido por años la cocina peruana, yo creo que el cacao y el chocolate es algo que ya está despertando. Incluso hay un Plan Nacional de Cacao y Chocolate; es importante siempre mencionar ambos, pero es una decisión política del Estado entre el año 2020 al 2030.
Ese plan debe incorporar sin duda la promoción decidida por el cacao y chocolate. Se están por ver los pasos, pero muchas veces nos podemos quedar solo en la ejecución, esperemos que no nos quedemos y sí lo aprovechemos. Especialmente en esta coyuntura, si bien Cacaosuyo se lleva la mayor cantidad de premios, hay marcas del extranjero que usan el cacao peruano y también muchas marcas peruanas; entonces, el cacao peruano está dando la hora y debemos aprovechar este momento.
¿Ha habido una disminución en la demanda de cacao y chocolate en el Perú? (Sobre todo por la pandemia)
Si hablamos de producción de cacao, durante la pandemia solo se vio afectada al inicio, con la confusión de saber si se podía cosechar el cacao, pero en realidad no ha habido pérdida. Hemos seguido aumentando la producción y también exportando. La agricultura en el Perú, por suerte, no fue necesariamente afectada. La venta de chocolate dentro del país sí, pero pareciera que en otras partes del mundo no fue así. Incluso, sabemos que en Estados Unidos, donde tenemos distribución, las ventas más bien mejoraron. Había gente que se quedaba en su casa y pedía por internet, no ha sido igual en otros países.
¿Qué país es el mayor competidor de Perú en este momento?
Tenemos un producto tan diferenciado; primero el Perú es el centro genético mundial del cacao. Nosotros tenemos una ventaja y en las pruebas de catas que se dan en diferentes partes del mundo, el Perú sigue siendo siempre el ganador. Es lindo ver que lo nuestro, siendo el país más agrodiverso del mundo, nos da maravillas como es el cacao. En realidad, hay diferentes formas de competir; con el chocolate competimos con todos los mejores del mundo y venimos ganando desde el 2015.
En volumen de producción de cacao no vamos a ganarle a Costa de Marfil, Ecuador o África, donde se produce el 70% del cacao del mundo, nosotros no somos un país gigante. Lo que debemos saber en el Perú es que por volumen de producción no vamos a ganar frente a otros países. En calidad le podemos ganar a todos y lo estamos demostrando.
¿Cuál es su estimado en ventas este año?
El año antepasado habíamos triplicado nuestras propias ventas. En el 2019 triplicamos las ventas del 2018. En el 2020 desafortunadamente caímos en un 12%, por la pandemia, en comparación con el 2019. Lo que proyectamos para este año es superar el 2019 y seguir nuestro plan de crecimiento. Pareciera que se están empezando a abrir un poco las cosas; Lima no es un mercado que ha mejorado mucho entre el 2020 y 2021, al menos hasta ahora.
¿Cómo se realiza una producción directa con los agricultores y de qué manera los beneficia?
Nosotros tenemos un trabajo que siempre es consciente respecto al precio. En África existe el problema de la esclavitud infantil y el Perú es un país que tiene los mejores indicadores de sostenibilidad en el mundo del cacao. Nosotros, como empresa, lo que hacemos es pagar bien; siempre pagamos muy por encima del precio del mercado, porque creemos que esa es la forma de apoyar a un pequeño agricultor. Trabajamos directamente con los agricultores, apoyamos de muchas maneras, entre el 20% y 100% por encima del precio normal, dependiendo del tipo de producto.
Fuente: Gestión