Enfermedad ataca las hojas, ramas, tallos y frutos. Aparece especialmente en ambientes húmedos y de baja luminosidad.
(Agraria.pe) La Federación Nacional de Cafetaleros de Colombia (FNC), a través de su Servicio de Extensión, determinó que se ha producido un incremento anormal de la denominada Gotera del café (Omphalia Flavida), especialmente en los departamentos de Santander, Bohacá, Meta, Casanare y Caquetá, que experimentaron durante el primer semestre del año aumento de lluvias y humedad, así como disminución del brillo solar.
La Gotera del café, que es conocida también como Ojo de Gallo, es un hongo que además de afectar las hojas, ataca ramas, tallos y frutos. Aparece principalmente en ambientes húmedos y de baja luminosidad, que son las condiciones perfectas para que se desarrolle y multiplique de manera rápida.
“Lo que estamos viendo en este momento en algunas zonas del país es una dinámica fuerte de esta enfermedad llamada Gotera, Ojo de gallo o Candelilla, cuando las condiciones del clima, reflejado en altas lluvias y baja luminosidad se presentan”, señaló Hernando Duque, gerente técnico de la FNC.
Agregó que la afectación del hongo se presenta en todas las variedades del café. “No existe resistencia varietal para la Gotera. Ni está demostrado que la incidencia sea mayor en una u otra variedad. Lo que agronómicamente está evaluado es que este hongo se multiplica rápidamente en lotes de café con exceso de sombrío, con alta humedad relativa, baja luminosidad, pocas horas de luz, bajas temperaturas, poca ventilación y regiones con alta precipitación y con deficiente drenaje”.
El principal efecto de la gotera es la caída de las hojas, que puede llevar a defoliaciones que comprometen el llenado de los granos y ocasionan la caída de los frutos.
Recomendaciones
La FNC inició una campaña nacional para orientar a los cafetaleros en prácticas adecuadas y oportunas para el control de la enfermedad.
“Iniciamos con el Servicio de Extensión una amplia campaña de información y divulgación para que los caficultores comprendan la dinámica y manejo agronómico que deben adelantar en sus plantaciones. Las diferentes acciones que iniciamos con el Servicio de Extensión tienen que ver con reuniones grupales, visitas a finca y divulgación de las recomendaciones agronómicas a través de volantes, plegables y mensajes radiales”, anunció Duque.
El vocero destacó que los caficultores deben estar atentos a los siguientes síntomas: la formación de lesiones circulares u ovaladas en las hojas, de color rojizo, que se tornan gris claro cuando envejecen. Estas lesiones terminan desprendiéndose y dejan un agujero en medio de la hoja. Cuando ataca a los frutos, se presentan estructuras en forma de agujas.
Como medidas de prevención, la FNC recomendó que antes del inicio de las lluvias se trabaje en descumbres y podas para mejorar la ventilación y entrada de luz; manejo de arvenses para evitar microclimas, excesos de humedad y concentración de inóculo; podas y desbajeres de lotes con presencia del hongo y mejorar la nutrición de las plantas. Además, si fuese necesario, se puede usar fungicidas, siempre con la recomendación de un extensionistas. Se debe tener en cuenta que el control químico, sin las demás medidas culturales no será suficiente ni exitoso.