Especialista del país norteño contó que ya superan las 5 mil toneladas en envíos del fruto a mercados del exterior y que trabajan para abrir las puertas de Estados Unidos, Japón y China, luego de un largo proceso de aprendizaje.
(Agraria.pe) El camino al desarrollo de los cultivos de palta Hass en Colombia no ha sido nada sencillo. Beatriz Montoya, asesora especializada en palta del país vecino, comentó que los productores están trabajando con especial énfasis el tema de la inocuidad y conocimiento de los ciclos de maduración pues hubo episodios de aprendizaje costosos para el sector.
“El análisis de residualidad de agroquímicos es muy importante y una limitante para la exportación. En Colombia tuvimos un episodio hace dos años con algunos predios de exportadores en los que se encontraron residuos de un agroquímico con persistencia de 120 días. Fue triste porque el producto en que habían trabajado tanto no se pudo exportar por los residuos en pulpa”, contó.
Otro punto de aprendizaje sucedió en el 2011, cuando Colombia logró exportar 11 contenedores y 2 de ellos nunca maduraron, lo que fue una experiencia difícil pues no hubo pago por el envío y la comercializadora tuvo que hacerse cargo de cancelar a los productores para que no perdieran el fruto de su trabajo.
Hoy, explica Montoya, todos los predios colombianos que se dedican a producir para exportar se inscriben ante el instituto agropecuario del país y cuentan con certificación Global Gap. Gracias a este trabajo, las paltas colombianas ya tienen las puertas abiertas –con los protocolos fitosanitarios aprobados- de los mercados de Panamá, Holanda, Antillas Holandesas, Aruba, Canadá y Reino Unido.
Además, se encuentra negociando con Japón y está próximo a realizar envíos a China, un mercado emergente en el que todos los productores de palta del mundo tienen interés. Sin embargo, la tarea pendiente es Estados Unidos.
“Colombia exporta actualmente a la Unión Europea, queremos ahora exportar a Estados Unidos y los mercados asiáticos. El mercado europeo tiene 500 millones de habitantes con un consumo per cápita de 600 gramos, una cifra que puede subir porque es reconocido como un fruto nutritivo y saludable y lo pagan… a Estados Unidos todavía no hay exportación, ya se hizo la evaluación de plagas y se exportó un contenedor de pulpa el año pasado”, anotó la vocera.
Para tener en cuenta
De esta manera, el país norteño busca hacerse de un espacio entre los principales exportadores mundiales de palta. De hecho, ya ocupa el séptimo lugar de ese ranking gracias a las 5.543 toneladas que exportó el año pasado. Una historia que comenzó, como recuerda la especialista, en el año 2009 cuando, con apoyo de técnicos peruanos, salió el primer embarque desde Colombia hacia el extranjero. Fueron 12 toneladas de palta para la Unión Europea –a la que luego se sumaron 20 toneladas más- que obtuvieron de los clientes muy buenos comentarios sobre la calidad del producto.
Desde entonces, con los baches comentados al principio, el sector ha crecido y mostrado una pendiente ascendente de exportaciones con 59 contenedores enviados en el 2013, 180 contenedores en el 2014 y las más de 5.000 toneladas ya mencionadas del año pasado. Esto ha ido de la mano con la extensión de áreas productivas, pues antes el fruto solo se extraía de la zona de Antioquía, pero ya desde hace un par de años se obtiene también del eje cafetalero y del valle de Tolima.
Las posibilidades de Colombia son muy importantes y si bien todavía está bastante lejos de representar una competencia relevante a la producción peruana (que está bordeando las 200.000 toneladas), es un protagonista a seguir en el sector pues cuenta con ventajas diferenciales como salida directa a los océanos Pacífico y Atlántico para llegar a sus mercados y una asociatividad incipiente.
Dato
.Beatriz Montoya formuló estas declaraciones en el marco de su participación como ponente en el VI Simposio Internacional de la Palta (SIPA 2016).