Se trata de una pila orgánica tan eficaz como las demás disponibles en el mercado, pero sin efectos contaminantes. Están fabricadas con materiales vegetales de desecho.
(Agraria.pe) El Grupo de Investigación en Física de Plasma de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL) Sede Manizales lleva trabajando los últimos seis meses en el prototipo de una pila orgánica tan eficaz como las disponibles en el mercado, sin los efectos contaminantes de las baterías convencionales, y fabricadas con materiales vegetales de desecho como la cáscara del plátano, el bagazo de la caña de azúcar o el hueso de aguacate.
Tal como explica el profesor Favio Nicolás Rosero Rodríguez, del Departamento de Física y Química de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales y líder de investigación en energías renovables y baterías orgánicas de la UNAL Sede Manizales, cuando las baterías se tiran a la basura terminan en grandes basureros mezcladas con otros desechos. Allí los residuos quedan a la intemperie, y cuando llueve, los líquidos segregados por la descomposición de otros elementos desgastan la envoltura de las baterías hasta que el cadmio o el mercurio, que es el componente químico más contaminante, se dispersa hasta llegar a ríos y quebradas. Según cifras del Ministerio de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, una sola batería puede contaminar hasta 100.000 litros de agua.
Para la investigación se tuvieron en cuenta tres productos típicos del Eje Cafetero: plátano, aguacate y caña de azúcar, que se sometieron a diferentes procesos científicos (caracterización) para hallar, entre otros, sus componentes. Estos componentes orgánicos fueron analizados a diferentes niveles: cristalino, microscópico y molecular. Así, descubrieron que después de algunos procesos la cáscara del plátano, el hueso del aguacate y el bagazo de la caña son idóneos como materia prima para la investigación.
En una próxima fase de la investigación se realizarán tres prototipos de baterías con cada uno de los productos. Con estos materiales se identificará la eficiencia de cada uno, tomando como base el rendimiento de las pilas disponibles en el mercado.
Daniel Pineda, del Grupo de Investigación en Física de Plasma y responsable de operar el equipo que determinará la eficiencia de las pilas orgánicas, afirma que “esperamos que la durabilidad de la nueva batería sea tan alta como cualquier otra pila normal de litio. Con esta investigación pretendemos demostrar que es posible resolver numerosos problemas solo mediante la exploración de materiales orgánicos renovables”.
El gran avance en esta investigación será la posibilidad de desechar las pilas orgánicas como si se tratará de una fruta, ya que después de cumplir su vida útil se degradan, e incluso funcionan como abono para la tierra.
Fuente: UN / DICYT / noticiasdelaciencia.com