Olmos, Majes Siguas e Ica están en la mira de este mercado. Actualmente el rubro de agroquímicos en el país está valorizado en US$ 200 millones con expectativas de crecimiento sostenido.
(Agraria.pe) La concreción de los próximos grandes proyectos de irrigación representa una oportunidad de crecimiento expectante para múltiples industrias, entre ellas la de los agroquímicos. Así lo reconoció Jorge Soriano, gerente de ventas de la Unidad de Protección de Cultivos de BASF, para quien el crecimiento de este rubro puede ser exponencial en el futuro próximo.
“Nuestro potencial de crecimiento está dado básicamente por el crecimiento de áreas de cultivo. El proyecto Olmos en dos o tres años debe tener 38.000 hectáreas implementadas y eso para nosotros significa un mercado creciente de uva de mesa, palta, arándanos, hortalizas menores como pimientos y alcachofas que se planea desarrollar ahí. Luego está Majes Siguas que debe operan en cinco o seis años, y otros proyectos como Ica con el trasvase de agua de Huancavelica. Ahí estamos enfocados para crecer”, declaró para Agraria.pe.
El ejecutivo recodó que, de acuerdo a la data de importaciones, el negocio de los agroquímicos en Perú alcanza hoy los US$ 200 millones, un índice modesto comparado con un mercado como Brasil que llega a los US$ 5.000 millones, pero que se muestra atractivo por su constante crecimiento durante la última década. “A pesar de ser pequeños, somos atractivos para la región”, refirió.
En cuanto al mercado de mayor peso en el país, Soriano apuntó que la uva de mesa significa para BASF una buena participación, especialmente por la necesidad de los productores del control de oídio, que es la principal enfermedad del cultivo. Sin embargo, también destacan las soluciones para el control de hongos en arroz y los biofertilizantes para quinua. Esto, sin dejar de lado los cultivos que no están destinados a la exportación sino al consumo local. “Así como tenemos portafolio para uva de mesa, palta, alcachofa, pimiento y espárrago, lo tenemos para papa, arroz, manzanos, quinua, cacao y café. Conforme vemos las necesidades del mercado pedimos la autorización al Senasa para traer las soluciones”. En general, resaltó que la empresa se encuentra entre las cinco más importantes en el país en cuanto a la importación de agroquímicos.
El portafolio de soluciones viene todo importado de diferentes orígenes: Estados Unidos, Europa (especialmente Alemania, que es la casa matriz) y recientemente Brasil, que distribuye para toda la región sudamericana.
En otro momento, el vocero de la Unidad de Protección de Cultivos de BASF explicó que sus productos se canalizan por dos vías principales. Una es la comercialización directa con clientes grandes como Camposol y otra, mayoritaria, es a través de distribuidores reconocidos, siempre buscando que se encuentren en las zonas de desarrollos de cultivos.
Finalmente, Soriano proyectó que el próximo año BASF crecería en el rubro de agroquímicos por encima del PBI agrícola, agregando que empezarán a desarrollar una línea de salud vinculada al agro con soluciones de control de hormigas, moscas y cucarachas en zonas de packing, centros de producción y galpones de aves.