Confederación Nacional Agraria (CNA): “hemos ganado una batalla, pero no la guerra, el reto es lograr un proyecto de ley que declare al Perú libre de transgénicos”
Raúl Yaipén Carranza
Lima, 9 Junio (Agraria.pe) Antolín Huáscar Flores, presidente de la Confederación Nacional Agraria (CNA), en una extensa entrevista a Agraria.pe realiza un balance de saliente gobierno y da a conocer sus expectativas sobre el próximo mandato de Ollanta Humala.
¿Cuáles son las funciones y objetivos de las Confederación Nacional Agraria?
R: La Confederación Nacional Agraria (CNA) desde su creación, por el Gral. Velasco Alvarado, en el contexto de la Reforma Agraria (1974), ha defendido los principios que guían el trabajo de lucha por una sociedad democrática, solidaria, que beneficie al campesino peruano, que respete los derechos y la dignidad de la persona.
Nuestro objetivo a lo largo de los años siempre ha sido el mismo, promover el desarrollo sostenido de la pequeña agricultura, desarrollando capacidades dirigenciales de hombres y mujeres, en beneficio de sus comunidades y actividades agrícolas.
¿Cómo calificaría el segundo gobierno de Alan García?
R: Conflictivo, indiferente y poco comprometido con las comunidades andinas, pequeños y medianos agricultores.
Si bien es cierto se ha crecido de manera sostenida y se ha apoyado a los exportadores y la imagen productiva del Perú es realmente buena, este gobierno también ha tenido enormes desaciertos, como la firma desmesurada de TLCs, sin tomar en cuenta el beneficio y la sostenibilidad de la pequeña agricultura nacional, que es la que solventa más del 70% del consumo nacional y más del 80% de las exportaciones.
Por otro lado, se han incrementado las inversiones en infraestructura que nadie niega que es necesaria, pero el cemento, los jardines y las pistas no alimentan a un pueblo que se sostiene de lo que cultiva.
¿Qué le parece la aprobación de la moratoria de 10 años, para el ingreso de los transgénicos?
R: Creo que es un logro para la sociedad civil organizada, que reaccionó frente al intento de perturbar y atentar contra nuestra biodiversidad, éste, al menos es un acto de resarcimiento con el pueblo peruano.
Pero seguiremos luchando, hemos ganado una batalla, pero no la guerra, el reto para nosotros como gremio agrario es lograr un proyecto de ley que declare al Perú libre de transgénicos, para eso ya tenemos diez años para demostrar técnicamente que en nuestro país la agricultura orgánica es sostenible.
El Perú tiene que aprovechar su diferenciación orgánica y saludable en el mundo, no podemos tirar atrás todo lo que se ha avanzado en el posicionamiento de nuestros cultivos en países como China, Alemania, Francia; entre otros, que ven a nuestro país como una gran tienda natural.
¿Qué espera la CNA de Ollanta Humala y de Gana Perú para los próximos 5 años?
R: Estoy convencido que la elección de Ollanta Humala significa la posibilidad de hacer cambios sustanciales en nuestro país como: revertir la idea de que el Perú es solamente una fuente extractiva de mineral y poder lograr un país productivo teniendo como base el agro.
Como gremio campesino nos sentimos ahora con tranquilidad y seguros de que el agro va emprender el rumbo que hemos estado esperando, el plan de gobierno de Gana Perú, es el único que nos ofrecía una alternativa promotora de la pequeña y mediana agricultura, a diferencia de los otros planes de gobierno que proponían básicamente la promoción de la agricultura a gran escala, y como sabemos la gran agricultura está en manos de monopolios quienes vienen acaparando la tierra y los recursos como el agua.
¿Cuáles son las propuestas urgentes y programáticas para el nuevo gobierno?
R: Desde la CNA pensamos que se tiene que promover el desarrollo de la agricultura sostenible, potenciando los mercados locales para lograr la seguridad alimentaria nacional con soberanía, con la metodología de campesino a campesino, propuesta por nuestro gremio hace más de 10 años.
Asimismo, se tienen que crear sistemas de producción agropecuaria forestal, fortalecer las capacidades de organización y liderazgo de las familias, comunidades campesinas, nativas y organizaciones agrarias, para la participación concertada en espacios de decisión local y regional.
En ese sentido, como Gobierno tienen que desarrollar capacidades de gestión y de propuesta con las federaciones agrarias regionales, constituyendo alianzas estratégicas con la sociedad civil, haciéndolos parte de las diferentes instituciones que tienen ingerencia en el agro nacional como: INIA, Senasa, Agrorural; entre otras.
Definitivamente, para que las promesas y objetivos se cumplan, la Confederación Nacional Agraria y todos los gremios e integrantes de la sociedad civil nos tenemos que articular para realizar acciones de vigilancia de la gestión pública, como: manejo de recursos; cumplimiento de compromisos y funciones; y respeto de derechos colectivos económicos, sociales y culturales de la pequeña agricultura. Tenemos que regresar hacia un orden de confianza y apoyarnos para lograr un bien común