Autor: Fenando Cillóniz
Lo natural se refiere a cosas que se producen solas, por las fuerzas de la naturaleza. Mientras que lo artificial, a las cosas hechas por el arte del hombre. Ambas –natural y artificial– deben convivir en armonía para la sostenibilidad de la vida en la Tierra. En lo natural hay cosas malas, como plagas y enfermedades; y también hay cosas artificiales malas, como las drogas y las armas nucleares. Sin embargo, el mundo está lleno de cosas artificiales que han coadyuvado al progreso de la humanidad. La medicina, la biotecnología, la cibernética, etc., son ejemplos de la maravilla del ingenio humano para vivir mejor. El problema es que hay personas retrógradas que piensan que solo lo natural es bueno y que lo artificial es malo. Esos son los que se oponen a la minería porque un reservorio artificial no puede sustituir a una laguna natural, a pesar de que el reservorio triplica la capacidad de almacenamiento de agua de la laguna. ¡No al fundamentalismo naturalista!