Hace casi 20 años, se inició en Ica el cultivo de uva de mesa, pero de manera tecnificada, el cual se destinaría a la exportación. Fueron empresas como Agrokasa, Agrícola Don Ricardo, AgroVictoria, entre otras, las brillantes pioneras que apostaron por este cultivo.
Al inicio se cometieron muchos errores, como no usar patrones pretendiendo copiar las prácticas de Chile, que no tiene nemátodos ni filoxera y siembran plantas francas. Este tiempo de aprendizaje costó mucho, pero se corrigió y hoy tenemos una industria reconocida internacionalmente. Mi agradecimiento a Chile, Estados Unidos, España e Israel por su colaboración.
Recuerdo esos años, cuando se decía que la uva no produciría en la costa norte peruana (lo mismo decían de los arándanos y otros cultivos que hoy son exitosos), ya que se necesita de climas templados como los que existen en la costa central chilena o en California (Estados Unidos), mitos que fuimos rompiendo.
Hoy, la uva es el principal cultivo agrícola de exportación del Perú, bordeando los US$ 700 millones, y estoy seguro de que seguirá creciendo por muchos años más, por lo que se convertirá en el cultivo emblema de nuestro país. Debo destacar que del total de la oferta peruana de uva, el 40% procede de Ica, siendo la principal región productora y exportadora de este cultivo, y lo seguirá siendo por muchos años.
Si miramos el mercado internacional, actualmente Perú es el segundo exportador de uva de mesa del mundo, superando a países productores tradicionales como Sudáfrica, Argentina, Italia, Brasil, Australia; y a pasos agigantados nos acercamos cada vez más a Chile, al cual de todas maneras superaremos debido a que los riesgos climáticos que afectan a los cultivos son muy altos en el país sureño.
Además, Perú sigue incrementando su oferta de uva y hay regiones donde se puede seguir apostando por este cultivo como Arequipa y el mismo Ica, donde las provincias de Palpa y Nazca esperan seguir contando esta historia de éxito.
Por estas razones, las posibilidades de crecimiento en el sector son enormes. Nuestras uvas van a todo el mundo, inclusive a Chile. ¡Qué gusto da ver cuán internacionalizada está la viticultura peruana y, más aun, que Ica sea la que la lidera!