Permiso de EE.UU. para el ingreso de la palta Hass mejoraría la demanda, incrementaría los precios y nos daría mayor poder en las negociaciones internacionales, aseguró el Ing. Fernando Cilloniz, presidente de la consultora Inform@cción.
Por Redacción
Lima, 22 Julio (Agraria.pe) “Que la palta Hass ingrese al mercado norteamericano sin tratamiento cuarentenario en base al frío, es -sin lugar a duda- un paso trascendental, la culminación de un excelente actuación del SENASA en Perú y la muy buena labor de la embajada peruana en los Estados Unidos, sin dejar de lado el invaluable trabajo de Prohass”, así lo indicó el Ing. Fernando Cillóniz, presidente de la consultora Inform@cción.
Asimismo, Cillóniz recordó que, actualmente, somos el principal proveedor de palta Hass hacia el mercado europeo y –según resaltó el ejecutivo– “la apertura del mercado americano será de suma importancia por el valor que importa, debido a la influencia de la migración mejicana que come casi todo con plata (guacamole)”.
Según Fernando Cillóniz, este permiso permitirá desahogar nuestra oferta exportable y direccionarla de manera estratégica y prudente hacia el mercado americano, “la palta, ya estaba haciéndose daño en Europa, debido a que la oferta ha crecido más que la demanda, sobre todo en los meses de julio y agosto, en que los precios bajan”.
Del mismo modo, el presidente de Inform@cción aseguró que este logro comercial, no solo incrementaría las exportaciones de la próxima campaña en un 25%, sino que –en menos de cinco años– se triplicaría la oferta nacional.
Respecto de la gestión para el permiso norteamericano, Cillóniz resaltó las estrategias usadas por el Servicio Nacional de Sanidad Agraria, que ha respaldado –a lo largo de estos años– con diversos estudios técnicos, la decisión de las autoridades americanas para demostrar que la palta Hass no es afectada por la mosca de la fruta y que puede ser importada sin tratamiento cuarentenario.
Finalmente, Cillóniz señaló, en relación a las múltiples y confusas declaraciones sobre este tema, que “para las instituciones estatales no es fácil dar declaraciones sin documentos que avalen lo expuesto, pero esas son simples razones burocráticas de envío y recepción de documentos, que no deberían opacar ni juzgar el enorme trabajo de los directivos y funcionarios involucrados en este logro”.
