(Agraria.pe) Según información otorgada por la Asociación de Productores de Arándanos del Perú (Proarándanos), la actual campaña 2023/2024 se inició mayo y “hasta la semana 33, se han enviado al exterior 23.554 toneladas de arándanos (entre convencionales y orgánicos), lo que representa una contracción de -39% en comparación al mismo periodo de la campaña anterior.
“La disminución en los volúmenes exportados se atribuyen al clima atípico en Perú, causado por el fenómeno del Niño, que ha resultado en un aumento de las temperaturas entre 4 y 5 grados en comparación con la media de las últimas décadas. Esto está afectando el ritmo de producción de los arándanos”, explicó Luis Miguel Vega, gerente general del gremio.
Detalla que hasta la semana 33 se han exportado un total de 21.075 toneladas de arándano convencional, lo que representa una contracción de -37% en relación a lo exportado en igual periodo de la campaña 2022-2023. Pese a ello, esta cifra representa un incremento de un 5% respecto a lo proyectado.
En cuanto al arándano orgánico, se han enviado un total de 2.479 toneladas, lo que significa una baja de -54% en comparación a lo alcanzado en el mismo periodo de la campaña anterior, y un 10% menos a la proyección realizada. Entre ambas producciones.
Por su parte, el ingeniero agrónomo y Mg Sc. Ricardo Víctor Arias Salcedo , señaló que “debido a lo benigno de las primeras dos décadas del siglo XXI se instalaron cultivos no tropicales en grandes extensiones en el norte del Perú, por ejemplo arándanos, que tienen serios inconvenientes de adaptación y pérdidas de hasta el 80% en la producción en el caso de arándanos producto de fenómenos climáticos”.
Arias explicó que “existe relación directa entre el cambio climático y El Niño, una simbiosis de ambos provocaría que entre 2023 y 2024 se presenten los mayores valores en el calentamiento global y acrecentar la actual crisis climática. En Perú, es necesario implementar la cultura de la lluvia en todas nuestras actividades, evaluar probables impactos, desarrollar planes de contingencia y sacar provecho a las bondades de El Niño”.
El fenómeno de El Niño y las consecuencias técnicas
Para Carlos Castillo, reconocido consultor internacional de arándanos, paltas y hortalizas, la baja productiva de los arándanos se debe a que el clima afectó la floración. “Un problema es que estamos entre 4 y 5 grados por sobre lo normal, la radiación de luz ultravioleta anda entre 11 y 12 UV y en esta época deberíamos de tener entre 3 a 4, lo que genera que la planta sea sometida a un estrés, sumado al alza en las temperaturas ha impactado en la producción de una manera increíble”.
Castillo explicó que las actuales condiciones generan un estrés en la raíz y problemas fitosanitarios en la planta, que entra en un fenómeno de hipoxia radicular y deja de tomar agua, luego la planta comienza a utilizar la glucosa de las reservas y se genera una caída en las hojas. Esto provoca que se reduzca la cutícula de los tallos y las hojas, generando daño por el sol, y esto lo pudimos observar desde la poda en la presente temporada”.
El experto en arándanos explicó que Ventura requiere muchas horas frío y eso ocasionó que la planta no tuviese las horas de baja temperatura necesarias, lo que ha producido un retraso en la floración en 60 días.
Oferta menor, aumento de precios
El gerente general de Proarándanos explicó también que una de las variedades más afectadas es Ventura. “Es la principal variedad exportada, la que representa el 35% del total de las exportaciones de arándanos. Debido a que su producción se ve afectada, esto repercute directamente en el avance de la campaña y las proyecciones”.
En base a la situación actual que enfrenta la industria de arándanos de Perú, Vega indicó que “se espera que las exportaciones de arándano disminuyan significativamente en comparación con la campaña anterior, principalmente debido al clima”.
Al parecer todo no es tan negativo, ya que el gerente general de la asociación mencionó que “el lado positivo es que estamos observando un aumento en los precios. Estos son más altos que en la campaña anterior, debido a una oferta significativamente menor”.
En esa línea el CEO – director comercial de Fluctuante, David Sandoval, comentó que “se estima que para septiembre - octubre tengamos todavía bajas hasta en un 40%. Lo interesante de la campaña es que como no hay mucha oferta, proyectamos que el precio podría llegar hasta los US$ 6.50, pero vamos viendo cómo se desenvuelve el escenario aquí en Perú”.
Sandoval agregó que “hay mucha preocupación aquí en Perú, ya que la variedad Ventura es la más afectada y la que tiene predominio en nuestro país. Dado a que tiene fruta un poco más grande, para poder llegar a esos mercados que teníamos vistos, que les gusta la fruta de calibres superiores, pero no está saliendo ahora porque requiere clima más frío para ser cosechada y eso no esta sucediendo”.
La evolución también se ha visto reflejada en las vías de transporte que ha utilizado la industria de los arándanos en Perú, ya que los envíos aéreos han presentado un crecimiento de un 13%, totalizando 1.225 toneladas. El transporte marítimo ha presentado una baja de un 41% ya que se han enviado por barco 22.154 toneladas. Caso contrario presenta los envíos terrestres, ya que se han enviado hasta la fecha 175 toneladas, lo que representa un crecimiento de un 252%.
EE.UU. mercado afectado por baja producción
Los mercados de destino de los arándanos peruanos se han visto afectados por la baja producción, donde destaca Estados Unidos como el principal destino, con una participación del 39% y totalizando a la fecha 9.173 toneladas, pero con un crecimiento negativo de un 53%.
Estados Unidos en la semana 33 registró un 63% menos de fruta que la campaña anterior. Del total del volumen enviado en dicha semana, el 64% se dirigió al puerto de Filadelfia, 22% al puerto de Hueneme, 12% al puerto de Miami y 2% al puerto de Los Ángeles.
En segundo lugar, se encuentra China, con una participación del 23% de los envíos de arándanos de Perú, a donde se han destinado 5.454 toneladas, pero con un crecimiento de un -45%. Del volumen enviado en dicha semana, 44% fue dirigido al puerto de Shenzhen; 44% al puerto de Shanghai, 6% al puerto de Shekou y 5% al puerto de Yantian.
Castillo se refirió a China, “el año pasado para la primera semana de agosto, Perú había exportado a China 13.576 toneladas, cosa que para la misma fecha del presente año fue un 28% menos, con envíos de 9.816 toneladas. Cuando comienzas a ver estos indicadores, te das cuenta de que esto está generando problemas”.
Luego se ubica Europa, con un 21% de participación, totalizando a la semana 33 una cantidad de 4.981 toneladas y una baja en el crecimiento de un 13% del total exportado en dicha semana. Un 80% fue dirigido al puerto de Rotterdam, 18% al puerto de Vlissingen, 2% al puerto de Algeciras y 1% entre el aeropuerto de Madrid y Berlín
El cuarto destino en participación es Reino Unido con un 9%, lo que representa 1.978 toneladas y un crecimiento de un -4%. Y el restante 8% se encuentra dividido en otros destinos, los que abarcan 1.968 toneladas y han tenido un crecimiento de un 24%.
Zonas exportadoras descienden
La baja en las exportaciones de arándanos se debe principalmente al descenso productivo de las zonas productoras de fruta. Lambayeque en la semana 33 ha exportado 2.676 toneladas, lo que representa una baja productiva de un 75%. La Libertad ha enviado a la fecha 12.622 toneladas, lo que equivale a un 37% menos que los envíos de la campaña anterior.
Áncash representa una disminución de un 19% en las exportaciones, totalizando 2.460 toneladas. Le sigue Piura con 938 toneladas a la semana 33, lo que refleja un 10% menos que los años anteriores.
Algunas de las principales zonas productoras de arándanos en Perú han presentado un incremento productivo, destacando Moquegua con 357 toneladas, equivalente a un crecimiento de un 87%; seguido de Lima con 2.606 toneladas enviadas a los diferentes destinos y un crecimiento de un 36%. Finalmente se encuentra Ica, con 1.881 toneladas y un crecimiento más estable de un 2%.
Fuente: Portal Frutícola
