07 junio 2019 | 09:55 am Por: Redacción

Opinión

Nuestra deuda con la quinua y el país

Nuestra deuda con la quinua y el país

“Celebramos el crecimiento de la exportación de quinua (de 36,661 toneladas durante el 2014 a 51,719 toneladas en el 2018), pero su consumo es famélico entre los peruanos”, sostiene Hernán García Valdeavellano, responsable de Comunicación Institucional del SENASA.

(Agraria.pe) La quinua es un producto de bandera y conocemos sus propiedades nutritivas, pero en el Perú solo consumimos dos kilos al año por persona, a diferencia del arroz cuya cifra supera los 54 kilos. 

Somos el mayor productor del grano de los incas, unas 80 mil toneladas anuales que representan el 53.3% del volumen mundial, superando a Bolivia (44%) y Ecuador (2.7%), según estadísticas de la FAO.

Celebramos el crecimiento de la exportación de quinua (de 36,661 toneladas durante el 2014 a 51,719 toneladas en el 2018), pero su consumo es famélico entre los peruanos.

Fuera de nuestras fronteras, al ser considerado un súper alimento su consumo y cultivo crece, principalmente en Europa.

Mientras tanto en Perú, olvidamos la responsabilidad que tenemos todos los consumidores con nuestra agricultura. En unas semanas estaremos celebrando el Día del Campesino y empezarán los elogios hacia las familias del campo, las críticas hacia el Gobierno, ¿y nosotros qué?

Apoyemos a la producción nacional con nuestro poder como consumidores. No nos quedemos en exigir cerrar nuestras fronteras a la importación de papa, presione consumiendo su pollo a la brasa en restaurantes que ofrecen papas nativas, que existen, son muy buenos y hay para todas las economías. 

No pierda tiempo observando los esfuerzos del vecino del sur para posicionar su aguardiente de uva en el mercado extranjero, por el contrario consuma pisco, que es peruano, invierta disfrutando de nuestra bebida espirituosa galardonada en un sin fin de concursos internacionales. 

Aproveche la lucha contra la plaga mosca de la fruta (que a partir de este año se extenderá por toda la costa y valles interandinos), que le brinda frutos sin gusanos y pague un poquito más para que nunca falten en su mercado más cercano. Recuerde que usted quiere apoyar al campesino, que también necesita ganar.

Proteja lo nacional, no ingrese al Perú productos de origen animal o vegetal sin autorización, ni flores para mamá, porque es alta la posibilidad que dañe nuestra agricultura trayendo plagas o enfermedades; incrementando los riesgos, trabajos y costos de vida a las familias del agro.

Vea la película ayacuchana Retablo, íntegramente grabada en quechua, que si bien primero tuvo que ganar 27 premios internacionales para estrenarse con buen pie en nuestro país, agotó las entradas en su primera semana de estreno.

Retomando, sabemos que el Gobierno tiene una alta responsabilidad frente a los agricultores, recordemos que los consumidores también la tenemos. Pregúntese, ¿qué hago por el Perú? Porque finalmente, si usted apoya solo una de las actividades económicas agrarias arriba mencionadas, los beneficios finales se reflejarán en la alimentación de su familia.

Por: Hernán García Valdeavellano, responsable de Comunicación Institucional del Servicio Nacional de Sanidad Agraria - SENASA

Etiquetas: quinua