Los cultivos liberados entre el 2014 y 2015 por el INIA fueron: la papa Poderosa 325, Algodón INIA 804 - Colorina, diversos tipos de maíz y variedades de quinua, entre otros.
(Agraria.pe) En el marco del Día del Campesino, que se celebró el 24 de junio, los investigadores del Instituto Nacional de Innovación Agraria (INIA) realizaron el ritual andino conocido como “Pagapu”, en el que ofrecieron los cultivos que han mejorado, a través de procedimientos científicos y métodos de selección.
La tradicional ceremonia contó con la presencia de agricultores de distintas partes del país y estuvo a cargo del sacerdote andino, Edmundo Supa Franco, proveniente de la región Cusco, quien honró a la Pachamama con los productos naturales, tal como hacían nuestros ancestros.
El secretario general del INIA, Ramiro Vargas Córdova, resaltó en entrevista para Agraria.pe que el Arroz-INIA512 “Santa Clara” es uno de los últimos lanzamientos que realizó su institución. Explicó que después de más de 18 años de trabajos de investigación, que incluso contó con la cooperación de otros países, lograron sacar esta variedad que es más rica en vitaminas que el arroz común, tiene un rendimiento potencial entre 10 y 12 toneladas por hectárea, requiere un menor consumo de agua (hasta 8,000 metros cúbicos) y se produce en cuatro meses por campaña.
Sostuvo que, de manera general, el INIA tiene en cartera un conjunto de productos que viene trabajando en cada una de las estaciones. “En realidad en cada estación se viene realizando investigaciones, que ya tienen varios años, para hacer más lanzamientos. Seguimos mejorando variedades de papa, de quinua, de germoplasmas de la chirimoya, en la producción de los camélidos, también de cuyes. Nosotros estamos esperando la disposición del Ministerio de Agricultura y Riego (Minagri) para poder anunciar cuáles son los próximos lanzamientos”, subrayó.
En el caso de la quinua, Vargas Córdova, dijo que están trabajando para mejorar su producción y tener una mayor efectividad en los cultivos que se hacen en la costa, de modo que pueda ser más productiva, lo que generaría nuevas oportunidades a los campesinos de que sus cultivos sean más rentables. Los inversionistas se enfocarían en este producto y los consumidores se verían beneficiados porque habría más quinua en nuestras mesas.
Respecto a las investigaciones para mejorar la producción de los cuyes, manifestó que se trabaja en el tema de transferencia, de cómo puede llegar a todas las regiones y poblaciones del país, lo que significaría una alternativa económica adicional para las personas que quieran dedicarse a la crianza de cuyes y ya no centrarse solo en el consumo personal.
El funcionario del INIA indicó además que, hasta el momento, han invertido S/. 1’500,000.00 en capacitaciones a más de 20 mil hombres de campo, en distintos temas como el manejo y uso de semillas de calidad, manejo adecuado de cultivos en tiempos de cosecha y poscosecha, entre otros temas.
“El campesino es quien tiene la tradición de producir en el campo, la ciencia ha llegado para acompañar al agricultor: estudia los productos, los mejora y saca una mejor variedad. Entonces, la articulación entre el campesino y la ciencia, es lo que vuelve más productivo al agricultor. ¿De qué sirve que haya un centro de investigación si el trabajo no puede llegar al agricultor? Y para eso hay que capacitarlos. El estado peruano, a través de instituciones como el INIA, puede llegar al hombre del campo para fortalecer su propia capacidad técnica y reforzar sus conocimientos para un mejor manejo de su producción”, subrayó.
Finalmente, afirmó que siempre hay mucho por hacer para mejorar la situación del campesino en el país, elemento fundamental para el bienestar de la población y de la seguridad alimentaria, por lo que es importante rendirle homenaje al hombre del campo.
“Los científicos se preocupan en la seguridad alimentaria, pero de nada serviría sin esas personas que originan, producen y hacen que ese alimento llegue a nuestras mesas y ellas son los campesinos, por eso hay que rendirles homenaje y centrarnos en que el agricultor tenga una mejor calidad de vida, que no sería más que justo”, apuntó.
Por su parte, Edmundo Supa Franco, sacerdote andino y campesino de la región Cusco, mencionó con orgullo que nuestra cultura ancestral nunca ha contaminado o ha destruido y que siempre ha tratado de acomodarse al medio ambiente, al tiempo que resaltó la importancia de no perder nuestras costumbres. Sin embargo, afirmó que la situación del campesino no ha mejorado e hizo un llamado a las autoridades de que se preocupen más por los ciudadanos que por las grandes empresas.
Datos
. Los cultivos liberados entre el 2014 y 2015 por el INIA fueron: la papa Poderosa 325, Algodón INIA 804 - Colorina, diversos tipos de maíz, Arroz INIA Santa clara 512, Palta La Molina, variedades de quinua, entre otros ecotipos.
. El evento contó con charlas y capacitaciones para los agricultores asistentes, a cargo de los especialistas del INIA.
