20 octubre 2017 | 11:25 am Por: Redacción

Como parte de sus actividades por el décimo aniversario

Apega presentó el libro “Revalorando el tesoro escondido”

Apega presentó el libro “Revalorando el tesoro escondido”

Publicación presenta las lecciones aprendidas del proyecto Cadenas Agroalimentarias  Gastronómicas Inclusivas, desarrollado con el apoyo del BID-Fomin.

(Agraria.pe) Ayer se realizó en el auditorio del BID la presentación del libro “Revalorando el tesoro escondido” con la presencia de la representante del BID, Viviana Caro; el viceministro de Políticas Agrarias, Benjamín Quijandría; el gerente de Apega, Mariano Valderrama y el coordinador del proyecto Cadenas Agroalimentarias Gastronómicas Inclusivas, Luis Ginocchio.

La publicación “Revalorando el tesoro escondido” sistematiza las lecciones aprendidas del proyecto Cadenas Agroalimentarias Gastronómicas Inclusivas, desarrollado por Apega con el apoyo del BID-Fomin en los últimos cuatro años. El proyecto ha cubierto diversas áreas que van desde la revaloración de nuestros mercados de abastos, el diseño y puesta en marcha de un nuevo modelo de ferias agropecuarias, así como la implementación de un sistema de comercialización virtual de productos agropecuarios emblemáticos.

El libro propone una serie de políticas de promoción de la cadena agro gastronómica, que Apega puso a consideración de expertos nacionales e internacionales en un foro realizado en marzo pasado en Lima. Allí participaron el viceministro Quijandría y el Ministro de Agricultura de Chile.

Viviana Caro, representante del BID, manifestó su satisfacción por el trabajo realizado ya que calza con la línea del BID-Fomin de incentivar proyectos innovadores. Asimismo, espera que, en el futuro, el trabajo de las ferias agropecuarias se pueda replicar a mayor escala y se reproduzca en otros países el modelo de la plataforma virtual de comercialización de productos agropecuarios. Por su parte, el viceministro Quijandría destacó que proyectos innovadores como Mistura y las ferias agropecuarias se convertían en pasos indispensables para el desarrollo de la cadena agro gastronómica. 

Desde sus inicios, Apega planteó que el ADN de la cocina peruana residía en sus milenarias cocinas regionales y su agrobiodiversidad, que representan una despensa privilegiada la cual nutre sus cocinas. ¿Qué sería de nuestra gastronomía sin su variedad de ajíes, papas nativas y choclos, sin sus granos andinos, quesos, cuyes y patos, sin sus frutas?”.

En una de las primeras ferias Mistura, en el Parque de la Exposición, Apega suscribió con dos gremios nacionales agrarios (ANPE y Conveagro) la denominada Alianza Cocinero - Campesino, en donde se reconoce al pequeño agricultor, junto con el pescador artesanal, como el primer eslabón de la cadena de valor gastronómica.

El boom gastronómico ha abierto las puertas para revalorar y facilitar al mercado nuestros productos emblemáticos de la agricultura familiar, la cual provee tres cuartas partes de los alimentos que llegan a la mesa de los peruanos. Apega, en sus diez años, ha puesto en el corazón de Mistura el Gran Mercado como vitrina de nuestra agrobiodiversidad y como espacio de revaloración del aporte de la pequeña agricultura. Domingo a domingo ha organizado, desde hace casi cinco años, una feria agropecuaria en la avenida Brasil con la participación de cerca de 60 agricultores de diversas regiones del Perú. Ellos venden sus productos directamente a los cada vez más numerosos caseros. La gestión de esta feria acaba de ser traspasada a una asociación conformada por los propios agricultores feriantes

Luis Ginocchio, quien ejerció la coordinación del proyecto, dio cuenta de los logros así como las dificultades que enfrenta nuestro país para desarrollar la cadena agro gastronómica e implementar una política y un moderno sistema de comercialización de los productos emblemáticos de nuestra agricultura familiar. “En otros países de América Latina se sorprenden de que se revalorice la pequeña agricultura, lo que hemos hecho se ve como algo revolucionario e innovador. En cuatro años de proyecto, vimos en los agricultores un deseo de mejorar y que existe un apoyo bancario. El mejor ejemplo es Nancy Cóndor, una pequeña industrial que comenzó sembrando maca en su natal Carhuamayo (a más de 4.200 m.s.n.m.) y ahora también produce alcachofas y tocosh. Un país agro diverso como el Perú merece una agronomía gourmet. Aún quedan cuellos de botella por resolver, pero miremos las oportunidades”, comentó Ginocchio.

Datos

Apega destacó que este décimo aniversario lo ha conmemorado lanzando ya cuatro publicaciones que reflejan el amplio abanico de sus actividades, que considera el rol de la gastronomía en el desarrollo de nuestro país y en la consolidación de su identidad:
·        El libro “Innovando la Gastronomía”, que presenta los aportes del II Congreso Internacional de Gastronomía, realizado en abril de este año.
·        El libro “Agenda de innovación tecnológica de la gastronomía peruana”, resultado de un proyecto de un año realizado por Apega con apoyo de Innóvate Perú.
·        La segunda edición actualizada y revisada del libro “¿Cuál es el futuro de la gastronomía peruana?”, publicación de Mariano Valderrama considerado como el segundo mejor libro del mundo en la categoría Profesional de los prestigiosos Gourmand World Cookbook Awards.
·        La actual publicación “Revalorando el tesoro escondido”, lecciones aprendidas del proyecto Cadenas Agroalimentarias Gastronómicas Inclusivas.