La unidad de esta fruta, que pertenece a la familia de las sandías y calabazas, se vendía hasta hace pocos días atrás en el país europeo a 1,14 euros (1,32 dólares), 130 por ciento más que hace un año.
(Agraria.pe) Los consumidores alemanes observan con preocupación cómo el alto precio del pepino, que se sitúa de un tiempo a esta parte en niveles máximos, encarece notablemente su cesta de la compra. La unidad de esta fruta, que pertenece a la familia de las sandías y las calabazas, se vendía durante la semana pasada en el país a un precio medio de 1,14 euros (1,32 dólares), según datos facilitados por la Sociedad de Información de Mercados Agrícolas de Alemania (AMI).
"Incluso en los meses de invierno constituye una excepción que un pepino cueste más de un euro", señaló a la agencia dpa Michael Koch, analista de mercados de AMI. En comparación con el mismo mes del año pasado, el precio del pepino se encareció un 130 por ciento.
En 2017, una unidad de esta fruta se adquiría por unos 49 céntimos de euro. No obstante, desde entonces el valor del pepino ha ido escalando hasta situarse en un segmento de precios alto debido a que su oferta ha sido más reducida.
Varios productores extranjeros se deshicieron de sus antiguas plantas y cultivaron otras nuevas, por lo que se redujo la cantidad de frutos. A ello se sumó el verano inusitadamente caluroso que se ha vivido en Alemania y que ha reducido también la producción nacional.
"El pepino es un poco sensible. Cuando hace mucho calor o recibe mucho sol, le afecta. Por ejemplo, existe el riesgo de que las plantas pierdan sus flores", indicó Koch. El pepino es un alimento muy consumido en Alemania, donde se prepara habitualmente en ensalada, se come crudo y también se utiliza para acompañar bocadillos y sándwiches (dpa, orange.handelsblatt.com, spiegel.de).
Fuente: Deutsche Welle
